Sergio García, tercer Chaqueta Verde español después de Seve Ballesteros (80 y 83) y José María Olazábal (94 y 99) y profesional de la PGA de España desde que se hiciera jugador profesional en 1999, piso ese lunes los primeros nueve hoyos de Augusta para beneplácito de los «patrons» y aficionados que celebraron a los grande los buenos golpes del profesional castellonense.
Una vuelta de 9 hoyos de prácticas en el Augusta National con Sergio García te da una visión ecuánime de mucho de lo que está pasando en el mundo del golf. El cariño, la admiración, los aplausos, los saludos y el calor con el que los aficionados y la propia organización del Masters les ha abierto los brazos sin reservas, más de un ‘Chaqueta Verde’ (que así llaman también a los patrons de Augusta) se ha parado a darle la bienvenida al castellonense, el tercer español en poseer una precia de esas Chaquetas junto con Seve Ballesteros (dos) y José María Olazábal (dos).
“Estoy feliz y encantado de estar aquí. Mucho del ruido que se ha montado alrededor del LIV es más mediático que otra cosa. Me siento cómodo aquí en Augusta y el público siempre nos ha acogido muy bien”, dice Sergio con una gran sonrisa de felicidad. Se le ve contento y relajado con su vida en el LIV Golf.
El Masters ha rota una tendencia de “personas non gratas” que envuelve a los golfistas “exilados”.
“Este año tenemos la posibilidad de jugar todos los Grandes, no sólo Augusta. Sólo hay un sitio donde no podemos jugar”, aunque no lo nombra, ya sabemos cuál es.
Sergio se muestra pletórico con su equipo en el LIV, los Fireballs, logo que exhibe en su jersey negro con el que ha jugado hoy. “Creo que los equipos están ya cerrados, no va a haber nuevas incorporaciones de esas llamativas. Hasta el Final de temporada con los que bajen y suban de división. Creo que estamos haciendo una buena labor con el LIV. Ahí están las estadísticas –para quien las quiera ver- la media de edad que ve un torneo del PGA Tour está en 65 años; y la del LIV en 40-42. Los torneos se llenan de gente y mucha gente joven que se apunta a este deporte”.
Volviendo a Augusta, “el campo estaba hoy un pelín blando, para mi gusto. Por la lluvia y el exceso de humedad, pero esto puede cambiar en los próximos días, que esperemos que no llueva. Aunque el tiempo anda ahí, ahí. Y en cuanto a mi juego, pues como siempre, estoy ajustando alguna cosilla a ver si remato un par de ajuste, pero está muy bien en general. Y aquí a darlo como, como vengo siempre: a dar lo mejor de mí. Ese es mi objetivo, y disfrutar al máximo con el golf. Mañana martes asistiré a la Cena de Campeones, por supuesto”.
P.- ¿Y si la suerte coincide y durante la semana hay un emparejamiento con Rory McIlroy?
R.- Pues estoy seguro que el irá a jugar su mejor golf y yo también, zanjó el de Borriol.
https://www.masters.com/en_US/watch/2023-04-03/16805409784706653/an_invitation_unlike_any_other.html
